Las actividades culturales del municipio tienen una economía propia que se destaca en la cocina tradicional, la artesanía, la música folclórica, tanto de acordeón sabanero como de viento, la danza y la luthería, entre otros.

En este marco de manifestaciones se destaca de manera notable una economía importante ligada a la fabricación de amasijos en sus diversas presentaciones. La elaboración de bollos de maíz y de diabolín son una de las principales fuentes de empleo para las familias del municipio, ya que incluye a varios actores dentro de su cadena productiva.

Las microempresas presentes en San Juan de Betulia son, en su mayoría, fábricas familiares de diabolín o yabolín elaborado a partir del almidón de yuca. Este producto se distribuye y comercializa en el municipio y en diferentes departamentos y ciudades.

En el municipio encontramos epicentros de fabricación como es el conocido “Pozo Nuevo”, ubicado en el casco urbano, en donde viven muchas de las familias productoras. Otro punto de producción económica ligado a la cultura gastronómica es Puerto Bollo, lugar donde se elabora y comercializa el bollo limpio.

Además de los amasijos, productos como el ajonjolí, también hace parte de esta economía.

En cuanto al mercado artesanal, en el corregimiento de Albania encontramos la alfarería, la cual ejercida por pocas familias, que fabrican tinajas, materas, moyos, cazuelas, bandejas, chochos y otras figuras artesanales cuyo principal mercado se encuentra en Sincé, San Pedro, Sincelejo y otros municipios cercanos. También en este corregimiento se encuentra la fabricación de jabón de monte, con sebo y lejía de ceniza.